VERANO

bronceado perfecto

VERANO

¡El sol nos hace bien, pero solo si nos protegemos!

Es normal en verano, ya sea en el mar, en la montaña o en la ciudad, exponerse más al sol, una exposición solar desconsiderada y sin las debidas precauciones puede provocar varios daños, un daño directo como deshidratación, enrojecimiento, quemaduras, quemaduras y eritema y también un daño indirecto, dañando desde el interior el sistema natural de la piel.

Además del daño térmico, por lo tanto, existe el riesgo de un daño energético que implica reacciones de envejecimiento:

envejecimiento prematuro, aparición de arrugas, alteración de la coloración, mecanismos de degeneración, Por lo tanto, proteger la piel de los rayos solares sigue siendo un hábito saludable y fundamental.

¿Cómo proteger la piel del sol?

No hace falta decir que tomar el sol significa aprovechar la fuente directa de Vitamina D, una vitamina muy importante para nuestro organismo, pero una exposición sin protección puede tener consecuencias peligrosas para nuestra salud.

La luz solar se compone de tres tipos diferentes de ondas: Luz visible, la que ilumina nuestra tierra, y en pequeña parte nuestro bronceado depende también de usted. Los rayos infrarrojos, responsables de la "calefacción", son de baja energía y no son peligrosos para nuestra salud.

+ Rayos ultravioletas (UV) divididos en:

- UVA, constituyen la mayor parte de la radiación UV que alcanza la superficie terrestre, y entre los 3 tipos de rayos UV son los mayores responsables del bronceado.

- UVB, son rayos de energía media y son los principales responsables de las quemaduras solares.

- UVC, son los de mayor nivel energético con los que entramos en contacto, pero afortunadamente son absorbidos en su mayor parte por la atmósfera y solo una pequeña cantidad llega a nuestra piel.

Entonces, ¿cómo elegir un protector solar válido?

El primero es el factor de protección solar (SPF) que debe estar preferiblemente entre 30 y 50+, índices de una protección alta y muy alta. El SPF se seleccionará de acuerdo con su fototipo de piel:

- FOTOTIPO 1 debe utilizarse un factor muy elevado (50+ o pantalla total) en el caso de pieles muy claras y pelo rojo o rubio.

- FOTOTIPO 2 debe utilizarse una protección alta/muy alta (entre 50+ y 30) con piel clara y sombreros castaños o rubios.

- FOTOTIPO 3 también se puede optar por una protección media con SPF entre 25 y 15 en caso de cabello rubio oscuro y/o piel sensible.

-FOTOTIPO 4 con cabello castaño y piel moderadamente sensible.

-FOTOTIPO 5 hasta un SPF incluso bajo, entre 10 y 6, indicado con cabello oscuro y tez olivácea.

-FOTOTIPO 6 pelo oscuro y piel oscura. La segunda característica que debe comprobar al comprar es la eficacia del sol tanto contra los rayos UVB como contra los rayos UVA, que debe estar claramente indicado en el paquete.

También es importante recordar dos aspectos fundamentales:

1. Nunca se deben utilizar las cremas abiertas del año anterior, incluso si aún no han caducado, porque son ineficaces, con el tiempo, el contacto con el ambiente externo puede alterar los filtros solares contenidos en el producto, incluso si son fotoestables.

El cierre incorrecto de la botella, la infiltración de arena, etc. pueden modificar la eficacia y las características de la protección solar, por lo que es importante tener en cuenta la fecha de caducidad o el índice PAO indicados en el envase primario o en la etiqueta, y sustituir el producto solar al final de dicho período para evitar cualquier tipo de riesgo para la piel.

El índice PAO indica el período después de la apertura en el que el producto solar abierto puede utilizarse de forma segura.

2. Disipamos el mito de que aplicar la crema equivale a no broncearse: ¡no es cierto!

Por el contrario, las cremas solares ¿Cómo y cuándo aplicar protector solar? La aplicación de protector solar también tiene sus propias buenas reglas.

La mayoría de los adultos deben usar aproximadamente 35 ml de protector solar por aplicación para cubrir todo el cuerpo, aplicar una capa demasiado delgada de producto podría reducir la capacidad del filtro solar para absorber o reflejar la luz UV.

Agite bien el recipiente y distribuya la protección solar generosamente por toda la piel expuesta, prestando especial atención a las áreas sensibles como la nariz, las orejas y los pies.

El protector solar también debe distribuirse sobre la piel seca 30 minutos antes de la exposición y volver a aplicar la misma cantidad cada 2 horas.

PARA PROTEGER A LOS NIÑOS DEL SOL... LA CREMA NO ES SUFICIENTE Durante un día al aire libre, ya sea en el campo, en el mar o en la montaña, hay algunos buenos hábitos a tener en cuenta al exponer a los niños al sol. Estas son las indicaciones a recordar:

-dejarlos a la sombra en las horas más cálidas, es decir, entre las 11 y las 17 horas (en caso de temperaturas muy elevadas, evitar que salgan)

; - favorecer las prendas muy ligeras y los tejidos como el algodón (evitar las fibras sintéticas que se calientan más fácilmente);

- refrescarlos de vez en cuando con un paño húmedo;

- hacer que beba mucha agua (no fría, preferiblemente a otras bebidas, sobre todo si están carbonatadas) en pequeños sorbos y con frecuencia; - no dejarlos en lugares cerrados como tiendas de campaña en camping o en coche;

- protegerlos de los rayos UV con gorras y protectores solares.

Recuerda siempre que los niños menores de seis meses nunca deben exponerse al sol directo.

Descubra nuestra línea solar ALKEMILLA. . .

Creados respetando la naturaleza, te ayudan a afrontar la acción de agentes como el agua de mar y el sol que, a menudo, en verano, pueden causar estrés al organismo. Utilizamos composiciones de base biológica no invasivas ni para la piel, ni para la naturaleza con la que, en verano, entramos más a menudo en contacto.

Desde aerosoles hasta leche solar, cremas faciales, leche después del sol, autobronceadores y leche solar para bebés, ¡en la gama de productos encontrará todo lo que necesita!